Por dos noches pagamos algo más de 100€,no valía ese precio. La ubicación no está mal, pero no estás en el centro, caminando 10-15 min. Debajo hay un Carrefour y un bar (además de tres funerarias, que está frente a un hospital). El chico que nos antendió fue amable, pero destacó más lo que debíamos hacer nosotros al salir que las prestaciones que ofrecían (no muchas, pero por ejemplo no nos comentó nada del wifi o el aire aconcionado). La habitación era terrible. Hacía calor porque la ventana daba a un patio de luces y no corria aire. En lugar de una cama de matrimonio, eran dos camas pequeñas de distinta altura y distinto tamaño, dispuestas de forma que la más grande estaba al lado de la puerta por lo que si la movías un poco ya chocaba con la puerta. La otra era con patas plegable y poca estabilidad. Los colchones y almohadas eran muy cómodos. No había cabeceros. El armario era antiguo pero funcional. Había un escritorio con una silla pero no había espacio para usarlo bien, la silla la usamos de segunda mesita de noche ya que sólo había una, y aún así el espacio escaso. Cortina que bloqueaba muy bien la luz pero que no permitía tampoco pasar el aire. Baño incomodo por poco espacio, chocabas con una columna al bajarte los pantalones. Un bastoncillo usado en el suelo así que la limpieza regular. Resumen: pasable pero con muchos detalles mejorables. Te insistían en usar una “encuesta de satisfaccion” imagino para evitar reseñas negativas. Repetiría Valladolid pero no aquí