Un Hotel muy bonito, mucha vegetación, el personal amable, no te dejan en espera cuando solicitas algo del hotel, las habitaciones no son tan modernas, pero tiene todo lo que necesitas, el parking es dentro, las puedas de entrada se cierran por las noches pero hay una persona siempre en la garita de vigilancia. La cereza del pastel es que hay dos tinas empedradas grandes estilo jacuzzi con aguas termales increíbles, no paramos ni un día en estar en ella. Gracias hotel Regis.